domingo, 14 de junio de 2015

VIENDO en popa. Por Gabriel Ruiz Arbeláez. En el evento: ÓSCAR COLLAZOS, IN MEMORIAM. TERTULIA MÉDICA No. 137. Cali, Junio 12, 2015.

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Publican y difunden 
NTC … Nos Topamos Con 
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VIENDO en POPA
“Lo más parecido a la felicidad. Todo estaba junto al mar.”

Por Gabriel Ruiz Arbeláez

Intervención en: 

ÓSCAR COLLAZOS, IN MEMORIAM. TERTULIA MÉDICA No. 137. Cali, Junio 12, 2015. NTC ... CUBRIMIENTO

http://ntc-documentos.blogspot.com/2015_06_13_archive.html


VIDEO


https://youtu.be/8IJKX9rk9Ws
Entra el video con poema ""Bahía Solano" de Óscar Collazos*
Cierra con el VIDEO: "Humanista Eximio" para Óscar Collazos **

Son de María Isabel, de NTC … y mías estas palabras.

Lo primero: Afecto, solidaridad y amistad para Jimena. El amor y las palabras de Óscar siempre la acompañaran y nos acompañarán … . Gracias por estar aquí.

Por esta nueva oportunidad: Gracias a la vida, a Adolfo Vera y a los contertulios asistentes,  “mompas” todos de Óscar y Jimena…

Un honor compartir esta intervención con los destacados invitados a participar … . Si alterado, inquieto y emocionado inicio este bello Homenaje es porque, según nuestro cardiólogo, no hay más remedio: prescribió y ordena que debemos comenzar por los orígenes, por el principio:   el nacimiento de Óscar en Bahía Solano el 29 de Agosto de 1942 …  y el segundo “nacimiento” mío, de un año, en Nuquí el 26 de Diciembre de 1943 (a las 2 pm)
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VIENDO en POPA
“Lo más parecido a la felicidad. Todo estaba junto al mar.”

Si bien, en su momento, lo publicamos en NTC …, considero de obligación y muy pertinente leer este mail de Óscar, uno de los últimos que recibimos de él: 
From:  o collazos@  
Date: Febrero 28,  201513:00 GMT-05:00    
Subject: Re: Oscar Collazos
To: ntc <ntcgra@gmail.com>

Queridos Gabriel y María Isabel: no saben de qué manera me fortalecen las expresiones de solidaridad que he recibido de los amigos y que ustedes, generosamente, han eneceteado.
Les reenvío la cariñosa carta que acabo de recibir de mi amigo el filósofo francés Gillles Lipovetsky, muy conocido y leído en Colombia. Mi optimismo me dice que sí podré acudir al encuentro que me propone en agosto en Cartagena. Puesto que sus palabras rebasan el campo estrictamente personal, se las ofrezco para NTC ... .
Ayer tuvimos la visita en casa de nuestro entrañable Adolfo Vera y hablamos de esa comunidad que han congregado alrededor de su portal, de lo que me habían conmovido las palabras de Fernando Cruz Kronfly y de ese vínculo que la amistad y la literatura vuelven fraternidad. 
A los amigos de NTC, gracias por toparme con ellos en la vida.
Un abrazo, Óscar

VIENDO en POPA.
“Lo más parecido a la felicidad. Todo estaba junto al mar.”

Inicio con Una somera crono-topografía, en palabras de Óscar:

-Mi padre, caleño ávido de aventuras, se había sumado a un grupo compuesto por algunos antioqueños, unos caldenses y otros vallunos para colonizar la selvática zona aledaña a lo que posteriormente se conoció como Bahía Solanoen el Chocó sobre el océano Pacífico. Allí se había proyectado localizar la desembocadura del canal interoceánico del ATRATO que competiría en mejores condiciones, por su privilegiada ubicación geográfica y estratégica, con el de Panamá. Además, se instalaría un importante puerto pesquero y un centro maderero de importancia. Esa ilusión les duró algunos años hasta que el paludismo, el desencanto y la ceguera de la clase dirigente fueron menguando sus ilusiones y sus ímpetus y los fue matando uno a uno. Allí nací y allí viví hasta los siete años cuando mi familia se trasladó a Buenaventura por obligadas circunstancias: En los días siguientes al asesinato de Gaitán, durante la revuelta que se desencadenó, los liberales de Bahía Solano –que eran sus amigos- se dieron cuenta de que mi padre era conservador, así que le dieron por encierro nuestra propia casa y de vez en cuando iban a visitarle para practicarle alguna requisa; después de esta operación se quedaban tomando aguardiente hasta altas horas sin hablar de política. El decidió cortar con aquella situación trasladándonos con nuestros bártulos a Buenaventura, una ciudad costera con mejores perspectivas. Este fue el  siguiente destino que tomó mi familia: mi papá caleño, mi mamá chocoana y los once hijos de la pareja.
Álvaro Suescún, Revista Olas # 4, Barranquilla, Marzo de 1985. http://ntc-narrativa.blogspot.com/2015_05_30_archive.html
El Heraldo, Mayo 24, 2015. Barranquilla. http://ntc-narrativa.blogspot.com/2015_05_24_archive.html

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Lo sigo citando:
Mi infancia en Bahía Solano, hasta los 7 años, son muchas imágenes confusas y hermosas. Muchas veces he creído que, por su sencillez, son lo más parecido a la felicidad: el mar, el marco de la bahía cubierto por la neblina del atardecer, la selva cercana, los juegos de niño bajo la lluvia, una humilde y grande casa de madera...”. O. C. Entrevista El Tiempo,  27 de enero de 2015 http://www.eltiempo.com/entretenimiento/musica-y-libros/recorrido-por-la-vida-de-oscar-collazos/15157515

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Se proyecta: 
ÓSCAR  COLLAZOS

Lee su Poema "Bahía Solano" 

Publicado en su libro "Biografía del desarraigo", Siglo XXI Ed., Buenos Aires (Arg.), 1974

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NTC ... VIDEO



BAHÍA SOLANO. De OC.
“Había tantas cosas junto al mar
que poco a poco
y sin clemencia
las he ido olvidando”
Poema Bahía Solano. Óscar Collazos. 1974. Fragmento final
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Muchos años después, frente a la noticia del último y definitivo naufragio de Óscar Collazos, su amigo de infancia y adolescencia, Perla y Gabriel habían de recordar, hablando por Skype, el día en que su padre los llevó a conocer el mar y a vivir por siempre con él (con el mar).
Procedentes de Pereira, el 22 de diciembre de 1943 llegaron por primera vez,  por carretera y por tren, a Buenaventura.  Los cinco (papá, mamá y sus tres hijos pequeños, la mayor – de 6 años- una mujer) se hospedaron en el Hotel Estación. El 25 de diciembre a las 6 de tarde zarparon desde el Puente del Piñal, en un pequeño barco costanero, con quilla y barriga de madera, rumbo a Nuquí.

Mirándolas desde la popa, aun tiritan y desaparecen las luces del puerto haciendo memoria de aquel remoto inicio del viaje, llegando la noche y saliendo de la bahía de Buenaventura …  
Fueron 18 horas de navegación  en mecido y asombroso viaje, sin escalas.
El trayecto es largo y es conveniente dormir unas buenas horas durante la noche, les había recomendado Ruiz White (el padre) a su joven esposa y a sus tres pequeños hijos (Perla, 6; Ernesto, 3 y Gabriel, 1). Ninguno durmió.
Llegamos al otro día de haber zarpado a eso de los 2 de la tarde. Inicialmente nos instalamos en el caserío de Nuquí. A los pocos meses nos trasladamos a la casa de madera y chonta que nuestro padre había hecho construir en la playa a unos cuatro kilómetros del pueblo,  en la salida hacia Tribugá. Allí vivimos la mayor parte de los 7 primeros años de nuestra infancia, con algunos períodos en otra casa construida  al lado de río Ancachí, arriba, en medio de la selva. Era tan inmensa “la finca” de mi padre que incluía casi todo el recorrido de aquel río y el de muchos de sus afluentes.

Por aquello del canal del Atrato, de la carretera Panamericana por el Darién,  del desarrollo del Chocó y de la construcción de barcos y de sueños fantásticos nuestro padre había conocido se trataba con el señor Collazos residente en Bahía Solano … . Y programaban y realizaban  reuniones allí, en Nuquí o en la Bahía de Utria. A la mayoría llegaban, navegando, en compañía de algunos de sus pequeños hijos que gozaban en aquellas estadías y lugares donde los pequeños lograban: “lo más parecido a la felicidad”, según  las palabras de Óscar.
….
No pocas veces dijimos:
Padre, están llegando los Collazos. Al frente ya se ve su potrillo a vela.  Muy pronto atracarán en Nuquí y en una media hora de camino por la playa estarán aquí.
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De la Bitácora infantil:

ALQUIMIA
Alambica la palmera
los zumos de la tierra y los del aire
y abrazada con el sol,
al canto del Diostedé,
el milagro de los cocos.

Cuando nos reuníamos en Nuquí, en Bahía Solano o en alguna playa intermedia, a los niños Collazos Camacho y a los Ruiz Arbeláez nos encantaba:
-        El mar, la selva, los ríos, la lluvia, las playas, los potrillos, las canoas, la pesca, … … 
-        El jugo de borojó en agua de pipa, con toques de limón.
-        Salir de paseo y de caza por la selva chocoana con nuestros cuatro perros orejones y con nuestros rifles de repetición bala U. Guaguas, venados, puerco de monte y perdices, entre otros animales, traíamos a casa.  
-        En el día, ir de pesca con anzuelos al cristalino río Ancachí –todo de los Ruiz – o al mar, en nuestros potrillos.
-        En las noches, aventurarnos en la faena de encandilar, con potentes linternas, peces, cangrejos  y muchillás para atraparlos con las manos.
-        Madrugar a revisar y a “cosechar” las catangas y los tarugos de guadua que en la tarde anterior habíamos preparado con banano maduro y coco en su interior  y que colocábamos en lugares estratégicos de los ríos. Era la fiesta de la abundancia, nuestras trampas estaban repletas de gran variedad de peces, muchillás, cangrejos y una que otra culebra.
-        El arroz con coco con cangrejo y almejas que preparaban nuestras respectivas madres. El encocado de muchillá. La sierra recién cogida asada al carbón, con tostadas de plátano.   (La cocina y gastronomía de Petronio)
-        Ir a los bautizos, a las fiestas y a los velorios a escuchar las cantaoras, acompañadas de grupos de marimba. (Desde esos lejanos y bellos tiempos nos conmovimos con la música de Pacífico y empezamos a admirar y a gozar nuestro Petronio Álvarez. Gracias Germán Patiño)
-        Cumplir con el deber de trabajar sacando a la playa a  “pastar cangrejos” a los marranos que criaba Perla para el consumo de nuestras familias y para venderlos vivos o su carne en la plaza del pueblo. (por su especial y balanceada alimentación la mejor carne de la región)
-        Gozar la fiesta de las aguas, bañándonos en la desembocadura de los ríos al juntarse con mar,  en medio de lluvias torrenciales.     
-        Recoger miles de conchas y caracoles  y coleccionarlas (Quizás llegamos a tener más que las de Neruda en Isla Negra)  
-        Con sol o con lluvia, jugar futbol en la playa.
-        Sorprendernos y admirar la sigilosa y silenciosa pesca del arponero que desde la playa sospechaba la diminuta estela de su presa.
-        Madrugar a seguir y observar la abundante pesca con chinchorro que instalaban y recogían acuerpados, fornidos  y disciplinados “chinchorreros” negros.   
-        Felices, estrenar potrillos personales, desafiando las inmensas olas y los seguros los naufragios …
-        Los postres y pasteles de coco utilizándolo su agua y su pulpa desde la más tierna pipa hasta la manzana, cuando ha germinado. 
-        … …
Para terminar un poema dedicado a Óscar: 

VIENDO EN POPA

Al último puerto, al cual casi no llego,
arribé cargado de vigorosos recuerdos.
Allí habito un barco viejo, abandonado.


Viendo en popa, a mí regresas
y, de nuevo, me invades.
Como en los apasionados viajes que hicimos,
volvemos a ser un solo cuerpo …



“De nidos se han ido llenando los mástiles”
y la memoria mía …
Los pájaros que allí nazcan
cantarán y contarán, de pronto, algo de mí …



En corto tiempo, los porteños y los míos
ya no nos verán …
A pedacitos, las olas y los vientos
nos habrán regresado al mar …

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-        DE RILKE:
"La única patria feliz, sin territorio, es la conformada por los niños."
"La verdadera patria del hombre es la infancia."

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Se cerró con 
** Documento recuperado

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"Humanista Eximio" para Óscar Collazos
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