martes, 11 de diciembre de 2012

Variaciones sobre la embriaguez. Iván Olano Duque. Ensayos. Hombre Nuevo Editores. Noviembre 2012

.

Publica y difunde NTC … Nos Topamos Con 
AÑO y NAVIDAD 2012 - NUEVO 2013
.
SEGUIMIENTO A ABRIL 21, 2013.


Pagina2 Editorial
Un conjunto de ensayos sobre arte y literatura compilados de manera concienzuda, exacta y delicada es ´Variaciones sobre la embriaguez´. Letras que componen un vendaval de poesía, páginas impregnadas de los sentimientos más sutiles y voraces de Iván Olano Duque, un joven escritor, que se estremece hasta el alma ante la insuperable belleza de la creación artística.

LA PALABRA. Periódico cultural de la Universidad del Valle publicado para la Región. Impreso y virtual. Abril 2013


....
.
SEGUIMIENTO A DIC. 21, 2012.


Variaciones sobre la embriaguez
Por: Julio César Londoño
Acabo de leer el que puede ser el libro colombiano más importante de 2012: 
Variaciones sobre la embriaguez, de Iván Olano Duque.
EL Espectador .com 21 Dic 2012 - 11:00 pm  Impreso: Dic. 22. Ver texto más adelante

.
.
ACTUALIZACIÓN A DIC. 12, 2012.

LANZAMIENTO DEL LIBRO. NTC ... Cubrimiento

Fotografías y Videos: 
Carlos Gaviria (Hombre nuevo editores),  Alberto Guzmán Naranjo, Iván Olano Duque y   Medardo Arias Satizábal. 
Variaciones sobre la embriaguez. Iván Olano Duque. Dic. 12, 2012
https://picasaweb.google.com/111515077843964359836/VariacionesSobreLaEmbriaguezIvanOlanoDuqueDic122012#

En los pie de foto de cada imágen: enlace al NTC ...  video de cada intervención completa. 
.

Habemus escritor. 
Por Medardo Arias Satizábal . 
El País, Cali, Diciembre 13, 2012. Opinión. Ver texto más adelante
.
.
Variaciones sobre la embriaguez 

Iván Olano Duque 

Ensayos 
Hombre Nuevo Editores* 
Noviembre 2012
http://www.hombrenuevoeditores.com/GALERIA/variaciones.html
.

Click derecho sobre las imágenes para ampliarlas en una nueva ventana. 

-
.
14.0 x 21.5 x 1.4 cms. 169 páginas
Ilustración de la carátula: Detalle de Nocturno* de la seríe Calles de pueblo. Manolo Torres ( 1 )
* Ver imagen más adelante (ampliable).
.
Iván Olano Duque 
-
.
.
.
"Un estilo a ratos escultórico, a ratos pictórico, a ratos arquitectónico y siempre musical".
                                                              William Ospina

.
El otro texto, más adelante en “Algunas palabras” ( fragmento a color)

.

.
Contenido

Algunas palabras *
13

El aedo y los colores
Sobre la correspondencia de las artes
17

Círculos y variaciones
Sobre el eterno retorno y Borges
45

El ruiseñor y la alondra
71

La locomotora y el silencio
Reflexiones en torno al arte y al siglo XX
93

Irás errante por las soledades
135
.
.
Algunas palabras
.
Por Iván O. D.
Cali, diciembre de 2011
.
Un poema de Borges anterior a una siesta me ha
señalado cierto juego de simetrías en una melo-
día de Brahms; cada abismo entre las montañas me re-
cuerda ciertos versos de T.S. Elliot; una luz precisa entre
los árboles, un leve movimiento de las hojas, una leve
geometría insinuada entre las ramas, la última voz en el
guaguancó de un verano. Cada día es la oportunidad de
inventar relaciones entre las cosas; la emoción estética, el
estremecimiento estético, el mecanismo mediante el cual
develamos las relaciones preexistentes y secretas.


Creo en las artes. Creo en el estremecimiento estético.
Creo en la embriaguez. Creo en la música como la ma-
nifestación elemental del álgebra, en la pintura como la
posibilidad de poblar de formas y resonancias al mundo,
en la danza como la respiración y el canto del mundo,
en la poesía como el más depurado estadio del pensa-
miento. Creo en Hólderlin cuando dice: "Lo que perdura
lo establecen los poetas", y en los griegos que cuando la
lógica y la conversación se agotan, cuando el silogismo
se enfrenta a murallas infranqueables, sabiendo lo único
que les mostrará el camino, se preguntan: "¿Qué dice de
esto el poeta?" .


El ensayo es el género del pensamiento; pero también
de la intimidad, de la reflexión, la duda, la curiosidad y el
asombro. No se trata tan sólo, entonces, de argumentos,
porque el pensamiento suele ser así mismo asaltado por
el filo de una luz, por el movimiento de un árbol o por el
recuerdo súbito de una música. Al ensayo, sospecho, no
le es ajeno la interrupción, el salto, el énfasis inespera-
do y la imagen. Esa voz que piensa, que conversa, "que
no comunica la verdad sino su búsqueda", que no puede
perder "el carácter libre, imaginativo y personal" como
escribió Jaime Alberto Vélez, debe exponerse entonces a
las emergencias del pensamiento y el ánimo. Este libro
intenta seguir esas líneas. No me he negado a la aparición
algo arbitraria de versos; de hecho, he notado -y agra-
decido - que son la tierra más fértil para las reflexiones,
y acaso parezcan ser su camino natural. La opinión de los
poetas, los versos que develan las relaciones preexisten-
tes y secretas de las cosas, son el lugar al que llevan todos
los caminos; acaso, también, donde empiecen.


A la hora de componer este libro de ensayos me asal-
ta la tremenda evidencia de que las preguntas acá plan-
teadas no entrañan ninguna novedad, que de hecho son
preguntas viejísimas, preguntas que muchos han honra-
do con un estudio minucioso, sincero, incansable, y de
las que han sacado conclusiones desde luego más afor-
tunadas. El Mefistófeles de Goethe dice: "¿Quién pue-
de pensar cosa.alguna, disparatada o razonable, que no
hayan pensado ya nuestros antecesores?" Pero también
suelo pensar en el deber que tenemos todos de hacernos
las mismas preguntas fundamentales, de interrogar los
mismos abismos, los mismos asombros, la misma lluvia
y el mismo sol. "Todos vivimos de las sobras del gran fes-
tín de Homero" escribió Esquilo, quien por una triviali-
dad -el tiempo- nunca leyó a Shakespeare; nunca leyó
a Borges.


Estos ensayos, que abundan -quizás fatalmente-
en enumeraciones, y donde el argumento lógico parece
subordinarse a las aventuras del reflejo, la simetría y la
repetición, son conscientes de ser viejas preguntas. 

El aedo y los colores, el ensayo que abre el libro, indaga el
viejo supuesto de la correspondencia de las artes, de un
origen, un desarrollo y un destinó común; Círculos y va-
riaciones, sobre el eterno retorno y la conjetura del teatro
dentro del teatro, parece menos un aplicado raciocinio
que un divertimento metafísico: un plagio más a Borges;
El ruiseñor y la alondra, inspirado por un diálogo de Ro-
meo y Julieta en el balcón sobre el jardín de los Capuleto,
sostiene que la apreciación estética es hija de la memoria
y el deseo, y que los fulgores reales de la obra de arte nos
están vedados; La locomotora y el silencio reflexiona sobre
eldiálogo entre el arte, la tecnología y la cultura del siglo
XX, las vanguardias que nacieron entre un mundo que se
desmoronaba, la crisis recíproca de los lenguajes artísti-
cos y del clima mental. El último ensayo, Irás errante por
las soledades, que habla de la soledad como una suerte de
embriaguez, y que gira alrededor de Leonardo da Vinci,
Goethe y Holderlin, es una interrogación del inquietante
mito de Fausto, ese mito que se ha apoderado de la ima-
ginación de las generaciones y que ilustra los desafíos del
artista creador.


Quizás el resultado no sea muy satisfactorio, pero el
inicio sin duda lo es. El estremecimiento estético, la pri-
mera embriaguez, da origen a estas páginas. Debo reco-
nocer, sin embargo, que si hay alguna idea acá que pa-
rezca original, no la he logrado yo; mi único mérito es el
de transcribirlas. Gracias, debo decir entonces, lector, por
permitirme mostrarle lo que en una conversación, en la
felicidad de la embriaguez, conjeturan mis amigos; lo que
en una conversación conjeturaba mi padre.

Iván O. D.
Cali, diciembre de 2011
.
------
.
"En “Variaciones sobre la embriaguez” vamos a entender mejor el sentido finito de la historia, la materia de la que está hecho el tiempo, el fin de las vanguardias, la locomotora de la música y del arte como un vehículo para entender mejor la condición humana."  Medardo Arias Satizábal 

.
.
.
"Iván Olano Duque, junto a su padre Iván Olano Henao, delante de la obra del pintor bumangués Manolo Torres. Esta creación ilustra el libro "Variaciones sobre la embriaguez". Olano Henao llamaba a este óleo "retrato anticipado de mi vejez...", sueño que no pudo cumplir, pues falleció hace poco más de 1 año en accidente de tránsito cerca de Camden, New Jersey, la tierra de Walt Whitman." Medardo Arias Satizábal 
.
Detalle de Nocturno* de la serie Calles de pueblo. Manolo Torres ( 1 ). 
Escaneó: NTC ... . Click derecho sobre la imagen para ampliarla en una nueva ventana. 
.

.
LANZAMIENTO y Presentación

*** 12 de diciembre, 2012, Cali,  6:30  pm
.
.
--- “Variaciones sobre la embriaguez”*. Iván Olano Duque **. Presentación del libro de ensayos.

Con la participación de Medardo Arias Satizábal (escritor) y de Alberto Guzmán Naranjo (Compositor y director de orquesta). 
"Si ya Esquilo se sentía abrumado por el gran banquete homérico, si ya el Futurismo Italiano deducía que la única alternativa válida era quemar los museos, si ya Picasso aventuraba que "después de Altamira, todo es decadencia" ¿no será una pretensión absurda crear un libro en los vértigos del 2012?” 
Intervención musical y copa de vino. 
Lugar:  Biblioteca Departamental, cra 5 #24a-91. Entrada libre. 
* Hombre Nuevo Editores: http://www.hombrenuevoeditores.com/ . 
Click derecho sobre las imágenes para ampliarlas en nueva ventana. 
** Sobre el autor: 
 .
.
NTC ... ENLACES: 
.

.
Al fondo William Ospina
Durante el evento (Dic. 6, 2012, Proartes, Cali): 

La serpiente sin ojos. William Ospina. Lanzamiento en Cali. Dic. 5, 2012. NTC ... Cubrimiento

http://ntc-narrativa.blogspot.com/2012_12_06_archive.html
Click derecho sobre la imagen para ir a la fuente. 
.
Intervención del Maestro Guzmán durante el evento
.
de NTC … ,  Nos Topamos Con  http://ntcblog.blogspot.com , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia.
++++++
.
NTC ... SEGUIMIENTOS
.

Habemus escritor

Por Medardo Arias Satizábal 

El País, Cali, Diciembre 13, 2012. Opinión

Palabras pronunciadas en la Biblioteca Departamental, Dic. 12, 2012. Próximamente enlace al NTC ... Video de la intervención. 
.
de NTC … ,  Nos Topamos Con  http://ntcblog.blogspot.com , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia.
.
Cuando supe que Iván Olano Duque había obtenido una mención en el Premio de Ensayo más importante de Cuba, no me llamé a sorpresa. Entendí que la sangre deja huellas, compartidas, hasta alcanzar categoría de hermandad, situación que me unió a su padre, Iván Olano Henao, y que llenó de palabras y conceptos la infancia de quien presentó ayer su primer libro: ‘Variaciones sobre la embriaguez’.

De ese estado febril de los sentidos que nos hace cantar, bailar, abrazar amigos, nos dejó varios ejemplos Dylan Thomas y también el tiempo amigo que nos ungió como ‘jóvenes’ y nos llevó a visitar orillas insospechadas, a explorar el mundo con ojos abiertos.

Luis Fernando Tascón tiene un recuerdo lejano de esa liturgia que celebramos este 12 de diciembre: Iván, el padre, va en un borrico por los montes y sus pies no alcanzan los estribos; años después adquirió en Bucaramanga un óleo del pintor Manolo Torres, al que llamó ‘retrato anticipado de mi vejez’ una calle larga, empedrada, de noche, y un anciano detrás de una mula, rumbo a la cuesta, con una lámpara en la mano. La calle está a media luz y tras los visillos se adivina una vida que duerme, un músculo que descansa mientras los cascos hacen música debajo de las estrellas.

Iván padre se fue antes de repetir esta escena, pero estoy seguro que marchó por esa misma calle en la noche insondable de los que no regresan, y llevó su lámpara, para buscar, como Diógenes, la verdad de los hombres.

Era Iván Alberto un niño cuando en compañía de su padre probábamos vino entre la niebla de la vía al mar, y salíamos a la noche para herir levemente la piel de un limón y comprobar que el limonero da su perfume a quien lo ama y al que está ebrio de fraternidad con la humanidad.

Pero no sólo la conversación y el vino nos unieron: también la gula. Quizá porque éramos más jóvenes y gozábamos de un desbordante apetito, podíamos comer y conversar hasta que nos sorprendía la madrugada, por las calles de Cali.

Alguna vez hicimos el ejercicio de componer canciones al alimón para dejarlas en las mesas de los centros artísticos, con la esperanza que los serenateros las encontrarán y les pusieran música. Y cantábamos a coro una canción extraída de las ficciones de Guillermo Cabrera Infante, esa composición que se repetía en todas las vocales como si fuera una lengua urgente, un invento que llamaba al juego y a la risa: “Yo te daré/ te daré niña hermosa/ te daré una cosa/ una cosa que yo sólo sé: ¡Café!”.

Y claro, más de una vez lo vi llorar en una mesa de ‘La Cueva de la Ranas’ por la madre de Iván Alberto. Era sólo su novio, entonces, y la llamaba amorosamente “Luisa eme”. De escuchar una canción en francés que hablaba de la Plaza Roja en Moscú, surgió el nombre de la hermana mayor de Iván Alberto: ‘Natalie’.

Como ven, esto, más que la presentación del libro de Iván Alberto, es una variación acerca de esas recónditas embriagueces que preludiaban ya al escritor y ensayista que hoy saludamos. Una pequeña historia de familia, de hermandad, que me permite estar aquí, al lado del hijo de uno de mis amigos más queridos, en la espera dulce y serena del fin del mundo.

En ‘Variaciones sobre la embriaguez’ entenderemos mejor el sentido finito de la historia, la materia de la que está hecho el tiempo, el fin de las vanguardias, la locomotora de la música y del arte como vehículo para entender mejor la condición humana. Brindemos por la huella indeleble de la sangre, y por esta noche en que Iván nos contempla risueño con una copa en la mano y la cítara en la diestra.

(Palabras pronunciadas en la Biblioteca Departamental).
----
.
SEGUIMIENTOS a 21 Dic 2012
.
Variaciones sobre la embriaguez
Por: Julio César Londoño
Julio César Londoño
Acabo de leer el que puede ser el libro colombiano más importante de 2012: Variaciones sobre la embriaguez, de Iván Olano Duque.
EL Espectador .com 21 Dic 2012 - 11:00 pm http://www.elespectador.com/opinion/columna-393757-variaciones-sobre-embriaguez . Impreso: Dic. 22.
Publicado por la editorial independiente Hombre Nuevo Editores, es una compilación de ensayos sobre arte y literatura escritos en una prosa exacta y delicada a la vez. Me decidí a leerlo porque el autor demuestra en el prólogo que la poética del género no tiene secretos para él: El ensayo, nos dice citando a Jaime Alberto Vélez, es una voz que piensa, que conversa, que no puede perder su “carácter imaginativo, libre y personal; que no comunica la verdad sino su búsqueda”. Luego Olano precisa: “Es un método menos axiomático que dubitativo y conjetural, menos una argumentación sólida y rectilínea que una leve y sinuosa”, y cierra con una frase que vale por siete Montaignes: “Es un diálogo con la duda, una reflexión sobre el papel, no anterior al papel”.
Quizá porque aborda asuntos de varias artes con un fraseo muy terso, William Ospina dice que estamos ante “un estilo a ratos escultórico, a ratos pictórico, a ratos arquitectónico, pero siempre musical”.
La contraportada nos da el sumario: “El aedo y los colores, el ensayo que abre el libro, indaga el viejo supuesto de la correspondencia de las artes, de un origen, un desarrollo y un destino común; Círculos y variaciones, que vuelve sobre el eterno retorno, es un divertimento metafísico antes que un aplicado razonamiento: un plagio más a Borges; El ruiseñor y la alondra, inspirado en un diálogo de Romeo y Julieta en el balcón sobre el jardín de los Capuleto, sostiene que la apreciación estética es hija de la memoria y el deseo; La locomotora y el silencio contiene una meditación sobre el diálogo entre el arte, la tecnología y la cultura del siglo XX, las vanguardias que nacieron en un mundo que se desmoronaba; el último ensayo, Irás errante por las soledades, entiende la soledad como una suerte de embriaguez, gira alrededor de Leonardo da Vinci, Goethe y Hölderlin, interroga el mito de Fausto e ilustra los desafíos del artista creador”.
Existe un feroz retruécano inglés contra el ensayo: “La mayoría de las ideas buenas de estos libros no son originales, y las originales no son buenas”. El libro de Olano sabe eludir esta maldición. También sabe, como Esquilo, que no hay nada más vano que la pretensión de ser original, “que todos vivimos de las sobras del gran festín de Homero”. Que la especulación es la piedra de toque del ensayo, como la imaginación lo es de la narrativa. Sabe, como cualquier griego, que lo bello es lo verdadero, es decir, que escribir bien es tanto un método como un arte. Tiene la cortesía de sustentar sus enumeraciones, en lugar de hacer retahílas de nombres célebres. Mira a Europa, claro, pero no le es ajena la cultura del Océano Pacífico. Camina con desenfado por los laberintos de la Antigüedad pero es, como todos los hombres, un hijo de su tiempo, uno que anda por estas calles, lee grafitis, cuadros sin figuras y músicas de extrañas armonías. Uno que respeta la manera como afina su instrumento el músico europeo, su oído matemático, la búsqueda de una altura precisa y predeterminada, sin que eso le impida admirar el intuitivo método del Pacífico, la manera como afina su cununo un músico de Guapi, como busca con paciencia un único color, ese capaz de traducir exactamente las ansiedades del alma y los endriagos de la mente.
Yo saludo la aparición de un libro de ensayos en un país, en un mundo que subestima semejante género. Que el libro sea una fiesta de erudición, es un regalo. Que la erudición sea un insumo, un punto de partida, no de llegada, es un acierto notable. Que su autor sea muy joven en un género propio de autores maduros, es una anomalía inexplicable y feliz.

.


Publica y difunde NTC … Nos Topamos Con 

AÑO y NAVIDAD 2012 - NUEVO 2013