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SOBRE "EL RÓMULO" PARA WILLIAM OSPINA. DEBATE. http://ntcblog.blogspot.com/2009_06_07_archive.html
Julio 29, 2009. Se agrega al debate:
¿ES ESTO UNA NOVELA?. Por Luis H. Aristizábal
Reseñas.Con el ojo puesto en las publicaciones colombianas
EL MALPENSANTE No. 99, Julio 2009. Págs. 70 y 71 VER:
¿”El País de la Canela”, es una novela?
http://ntc-narrativa.blogspot.com/2009_07_29_archive.html
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William Ospina
Palmira (Valle), Mayo 2007
(Click sobre las imágenes para ampliarlas. Click en "Atrás" en la barra para regresar al aquí)
Fotografía: María Isabel Casas de NTC …
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William Ospina ganador de la XVI Edición del Premio Rómulo Gallegos
http://www.celarg.org.ve/Espanol/(JUNIO%202009)%20WilliamOspina%20ganador%20del%20PINRG.htm
MATRIZ: Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos , Celarg , ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Cultura de Venezuela , http://www.celarg.org.ve/Espanol/index.htm
Enlaces relacionados:
http://www.celarg.org.ve/Espanol/Premio%20Romulo%20Gallegos.htm
http://www.celarg.org.ve/Espanol/Premio%20Romulo%20Gallegos%2016%20Edicion.htm
Reprodujo, publica y difunde: NTC … Nos Topamos Con … http://ntcblog.blogspot.com/ , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia, Junio 5, 2009
El jurado del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos, integrado por Humberto Mata y Enrique Hernández D' Jesús, de Venezuela; Graciela Maturo, de Argentina; Miguel Barnet, de Cuba, y Elena Poniatowska, ganadora de la XV edición, de México, anunciaron hoy jueves 4 de junio el ganador de la XVI Edición de este importante galardón literario, honor que recayó sobre el escritor colombiano William Ospina, por su obra El país de la canela.
En su veredicto el jurado señaló sobre la obra de Ospina “… se trata de una lectura interpretativa de los primeros viajes de los europeos por el Continente, con una fuerte proyección hacia el presente. Su excelencia literaria reside en la sólida estructuración de sus capítulos, su fluido lenguaje, que no hace alarde de erudición epocal, en su vuelo poético y en su ajustada eficacia narrativa y capacidad de atraer al lector. Es una obra inspirada en discursos coloniales, en particular los de Fernando González de Oviedo –admirado maestro del personaje narrador—que no escatima crudezas en los aspectos más criticables y brutales de la gesta hispánica, sin caer en burdas simplificaciones. Su mensaje supera dicotomías tales como hispanismo e indigenismo, abarca las contradicciones con espíritu humanista y asienta una ética de respeto a la cultura del otro”.
William Ospina, poeta, ensayista y traductor colombiano, nacido en Padua (Tolima) el 2 de marzo de 1954. Estudió derecho y ciencias políticas en la Universidad Santiago de Cali y trabajó como publicista y periodista entre 1975 y 1990. Ha dictado conferencias y realizado lecturas de su obra en distintas capitales del mundo, y publicado varios libros de ensayo, entre los que se destacan Es tarde para el hombre, Un álgebra embrujada, ¿Dónde está la Franja Amarilla?, La decadencia de los dragones, Herida en la piel de la diosa, Nuevos centros de la esfera y América Mestiza. Es socio fundador de la revista Número y autor de cinco libros de poesía. En septiembre de 2005, Alfaguara publica Ursúa primera novela de una trilogía sobre los viajes al Amazonas en el siglo XVI. El país de la canela es la segunda y le seguirá La serpiente sin ojos .
El Jurado también destacó la amplia acogida que en esta oportunidad ha tenido el Premio, convocando a 275 concursantes de 19 países de habla castellana. “De igual modo, resaltamos la gran variedad temática y formal de las novelas, en las que se destaca el rescate de la fuente histórica, la novela subjetiva, lo fantástico, lo mitológico, las obras de imaginación poética, las novelas biográficas, las sagas familiares, entre otros temas”.
Fueron seleccionadas como finalistas: La Ceiba de la memoria , de Roberto Burgos Cantor (Colombia), El profeta imperfecto , de Fernando Butazzoni (Uruguay); El país de la canela , de William Ospina (Colombia); Bolívar. Delirio y epopeya , de Víctor Paz Otero (Colombia); Tratado del amor clandestino , de Francisco Proaño (Ecuador); Los ojos del huracán , de Berta Serra Manzanares (España) y La historia que me escribe , de Fernando Trías de Bes (España).
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Veredicto de la XVI Edición del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos
http://www.celarg.org.ve/Espanol/(JUNIO%202009)%20Veredicto%20del%20jurado%20PINRG09.htm
MATRIZ: Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos , Celarg , ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Cultura de Venezuela , http://www.celarg.org.ve/Espanol/index.htm
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Nosotros, miembros del Jurado de la XVI EDICIÓN del Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos, destacamos la amplia acogida que en esta oportunidad ha tenido el Premio, convocando a 275 concursantes de 19 países de habla castellana y señalamos la alta calidad de las obras presentadas. De igual modo, resaltamos la gran variedad temática y formal de las novelas, en las que se destaca el rescate de la fuente histórica, la novela subjetiva, lo fantástico, lo mitológico, las obras de imaginación poética, las novelas biográficas, las sagas familiares, entre otros temas.
El Jurado seleccionó como finalistas:
- La ceiba de la memoria, de Roberto Burgos Cantor (Colombia)
- El profeta imperfecto, de Fernando Butazzoni (Uruguay)
- El país de la canela, de William Ospina (Colombia)
- Bolívar. Delirio y epopeya, de Víctor Paz Otero (Colombia)
- Tratado del amor clandestino, de Francisco Proaño (Ecuador)
- Los ojos del huracán, de Berta Serra Manzanares (España)
- La historia que me escribe, de Fernando Trías de Bes (España)
Decidimos por unanimidad otorgar el Premio Rómulo Gallegos 2009 a la novela El país de la canela, del escritor colombiano William Ospina. Apreciamos en esta obra valores literarios, históricos y filosóficos. Convenimos en que se trata de una lectura interpretativa de los primeros viajes de los europeos por el Continente, con una fuerte proyección hacia el presente. Su excelencia literaria reside en la sólida estructuración de sus capítulos, su fluido lenguaje, que no hace alarde de erudición epocal, en su vuelo poético y en su ajustada eficacia narrativa y capacidad de atraer al lector. Es una obra inspirada en discursos coloniales, en particular los de Fernando González de Oviedo –admirado maestro del personaje narrador—que no escatima crudezas en los aspectos más criticables y brutales de la gesta hispánica, sin caer en burdas simplificaciones.
Su mensaje supera dicotomías tales como hispanismo e indigenismo, abarca las contradicciones con espíritu humanista y asienta una ética de respeto a la cultura del otro.
En Caracas a los 04 días del mes de junio de 2009.
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LA NOTICIA y ENTREVISTAS EN:
*** EL ESPECTADOR, Bogotá: “Estamos viviendo la felicidad de escribir” , http://elespectador.com/articulo144066-estamos-viviendo-felicidad-de-escribir La primera página en .pdf : http://s3.amazonaws.com/elespectador/files/757a4eaff43bc77c0abd4bc931046b2d.pdf
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EN EL TIEMPO, Bogotá: 'Este premio es un agradecido asombro', dijo William Ospina, al ganar el Rómulo Gallegos , http://www.eltiempo.com/culturayocio/libros_in/este-premio-es-un-agradecido-asombro-dijo-william-ospina-al-ganar-el-romulo-gallegos_5353467-1
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EN EL PAIS, de Cali: 'Canelazo' , http://www.elpais.com.co/historico/jun052009/VIVIR/ospina.html William Ospina es el cuarto colombiano en recibir el Rómulo Gallegos, considerado ‘el Nobel de las letras hispanoamericanas’. Su novela, ‘El País de la Canela’, se impuso ayer ante 274 rivales..
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William Ospina en Calarcá, Junio 24 a 26, 2009. Confirmado.
UN DIA ANTES.
Por Carlos Alberto Villegas Uribe* . Termita Caribe, termitacaribe@gmail.com
Madrid, 5 de mayo de 2009
Reprodujo, publica y difunde: NTC … Nos Topamos Con … http://ntcblog.blogspot.com/ , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia, Junio 6, 2009. Los enlaces, con todo respeto, son de NTC … .
Al finalizar el Paseo de los Recoletos, el original Palacio de los Marqueses de Linares abre su fachada a la madrileña plaza de Cibeles. Luego de un sueño agónico que duró casi un siglo, esta joya arquitectónica regresó a la vida en 1992 para conmemorar el bicentenario del encuentro de dos mundos. La riqueza de sus pasillos, con sus gobelinos, mármol de Carrara, arañas de cristal y pinturas románticas que miran juguetonas a los visitantes desde sus bóvedas ilustradas, está dedicada ahora a reestablecer nexos y validar los aportes a la cultura iberoamericana de las tierras conquistadas bajo la cruz y la espada. Por esa misma razón, los habitantes del Madrid contemporáneo conocen el antiguo Palacio de Linares por la denominación que su función cultural le otorga: Museo Casa de América. Un escenario de 3.064 metros cuadrados en el que vibra el arte y la cultura, y donde los más importantes escritores se dan cita en un evento que incrementa año a año su presencia intercontinental: El Festival Viva América. La mayor fiesta integradora de la lengua panhispánica.
En este palacete que podría congelar el espíritu de una América libertaria, artistas de todos los países de ese grande Sur que cantara el recién desaparecido Mario Benedetti, comparten sus cosmovisiones y sus propuestas creativas, y dinamizan, con sus palabras y sus hechos, una mirada heterodoxa que quiere tocar el corazón de los españoles y vivificar el espíritu de los coterráneos interesados en diálogos abiertos y enriquecedores.
El 3 de Mayo, en compañía de Amanda Navarrete, una colombiana que ahora se abre espacio en el proyecto teatral Curtidores, iniciativa impulsada por otra compatriota, nos acercamos con Elena María Ospina al Museo Casa de América. La idea, contactar al escritor colombiano –poeta, ensayista, novelista– William Ospina. La tarea, confirmar con él, a solicitud de Jaime Lopera su participación en el II encuentro de escritores colombianos Luis Vidales, dedicado en esta oportunidad a revisar los mecanismos, alcances, limitaciones y retos de la Novela Histórica .
Es cierto que hemos tenido la oportunidad de compartir con William Ospina algunos escenarios como Café con Verso, el encuentro de la cultura cafetera donde participó como jurado de un concurso nacional de poesía joven que impulsamos con el apoyo del cuentista quindiano José Nodier Solórzano Castaño, autor de Historias del prologuista y actual presidente del Consejo Nacional de Literatura, y de Oscar Iván Sabogal, Alcalde de Calarcá en aquellos momentos. Pero es cierto también que los afanes de la organización no facilitaron el tiempo suficiente para departir con el poeta y ensayista de entonces. Solo tuvimos la oportunidad de oírle contar algunas anécdotas sobre su reciente visita a Cuba y comentar colectivamente en el ambiente informal del Restaurante La Fogota, de Calarcá, algunos aspectos de su también reciente ensayo La Franja Amarilla; una lúcida lectura de la realidad colombiana que a la altura del presente siglo conserva la vigencia de sus observaciones.
Así que el temor de que William no me reconociera, me intimidó de alguna manera. Por eso agradecí, en aquel espacio, la inesperada y siempre sorprendente y lúdica presencia del poeta Carlos Muquitay, a quien conocemos en el Quindío como El Poeta Loco, remoquete que el mismo se ha encargado de consolidar. Como si los dos términos no constituyeran, por sí mismos, una redundancia. El poeta es la mirada que alucina, el loco que transgrede el mundo dado apoyánodose en la razonada sin razón del verbo sugerente que lo salvaguarda y le abre puertas a otras dimensiones. Concepto tratado con belleza y suficiencia por Michel Foucault en Las palabras y las cosas.
Acompañaba a Muquitay, Javier García, un quindiano que ahora trabaja en proyectos editoriales en tierras de Cervantes. Es decir, otro Quinjote, neotérmino que puede traducirse como quindiano con vocación de Quijote.
Así que cuando William Ospina descendió las escaleras e ingresó en el salón custodiado por los organizadores, topó con la infranqueable antesala quindiana. El poeta loco no dudo en inundarlo con un abrazo abarcador de sincera admiración y enseñarle el libro El País de la Canela , con la consabida amenaza del autógrafo. Yo, más tímido, aunque nunca lo parezca, abordé al escritor, y no me atrevo a decir que amigo, con la consulta que me habían encomendado desde Calarcá.
Claro, también intenté hablar con él sobre la sensible crónica Cien Kilómetros con William Ospina, que Hugo Hernán Aparicio Reyes publicó en la edición de enero de la Termita Caribe; pero los organizadores del recital en la Casa de América lo invitaron a pasar. Otra vez el diálogo con un posible amigo había quedado trunco. Ya la vida nos brindará la oportunidad de compartir proyectos, que es la mejor forma de ser amigos. Al menos eso sueño.
La joven presencia del periodista Antonio Lucas precedió la voz del escritor colombiano. Nos brindó su comprensión de la obra poética de William Ospina, y subrayó la certeza de su fortuna al ser invitado por el Museo Casa de América a presentarlo. Como lo explicó, siempre se quiere conocer a los poetas que se admiran y se quieren desde la lejana relación con la página escrita. Al citar el poema ¿Con quien Habla Virginia caminando hacia el agua? hizo hincapié en que este libro, que aborda el siglo XX, es uno de los que más ha disfrutado de la poesía de nuestro compatriota. “Un repaso al siglo XX, ese siglo de amenazas y extinciones, pero no como el que recurre al tiempo para ajustar las cuentas, sino como aquel viajero que se echa a andar por el espacio emocional de su época y ahí se encuentra con fantasmas y amigos, con paisajes y mares, con todo aquello con lo que confecciona su educación sentimental tan fragmentaria, tan sincopada, es decir, tan siglo XX”. Los poemarios de William –señaló Lucas– son, de alguna manera, cofres contra el olvido, algo que el autor también trató y contra los que se reveló en un volumen de ensayos que conviene leer “La franja amarilla”.
Luego de la presentación, la voz suave de William Ospina fue desgranando las palabras sobre un volumen que recogía la mayoría de su poesía publicada entre 1974 y 2004. Entonces, la historia del mundo entró al recinto como vaharada de pájaros y sacerdotes antiguos, y con un dolor de cerbatana que reclama a Occidente su locura de progreso incesante e insensato. Y detrás de cada verbo acariciado, de cada delicuescencia consentida, de cada contacto chamánico con una esencia que supera los reclamos dicotómicos de Neruda en su Canto General, una profunda conciencia de ser y de estar en el mundo y con el mundo fue creciendo en cada uno de los asistentes, hasta estallar en el aplauso de gratitud por la visión cambiada, por la mirada alternativa que la inesperada relación de las palabras devolvía a los sentidos.
Recital de poemas a cargo de William Ospina 03/06/09
http://www.casamerica.es/es/casa-de-america-virtual/archivo-virtual/videos-y-audios/recital-de-poemas-a-cargo-de-william-ospina-03-06-09
Salí pronto del recinto para comunicar a los organizadores del II encuentro de Escritores Colombianos Luis Vidales, lo que será una de las noticias culturales en el eje cafetero: William Ospina reconfirmaba su asistencia a este encuentro que tiene como escenario la Villa del Cacique.
Calarcá celebrará, en tres ciclos claramente programados, un bazar de voces, acercamientos y reflexiones sobre la Novela Histórica. De hecho ya lo está haciendo. El ciclo pedagógico involucra a los estudiantes quindianos en la comprensión de este género. El ciclo cinematográfico devuelve a la retina de los asistentes el trabajo de grandes directores y películas sobre la literatura histórica. Y finalizando junio, el plato fuerte: el ciclo literario. Allí se consignan nombres de trayectoria internacional, nacional y regional en el arte y la literatura: Fernando Cruz Kronfly, Andrés Hoyos, Leonel Giraldo, Juan Esteban Constaín, Fernando Quiroz, Nahum Moth, Fabio Martínez, Libaniel Marulanda, Susana Henao, Elías Mejía, Carlos Alberto Castrillón, José Nodier Solórzano Castaño, Cesar Valencia Solanilla, Luis Eduardo Gallego Valencia, Gilberto Lasso, Martha Lucía Usaquén, Esperanza Jaramillo; Carlos Fernando Gutiérrez, Umberto Senegal, Jorge Julio Echeverri, Fernando Jaramillo Echeverry, Martha Elena Hoyos, Orlando Rivera, Alejandro Herrera, ... .
Y detrás de ellos, apoyando la iniciativa, un grupo importante de instituciones y personas que creen en estos Quinjotes, en la capacidad de su trabajo constructor; distanciado por completo de los negros propósitos de las aves de carroña que ahora azotan y enlutan los horizontes de bienestar y progreso de los quindianos.
Instituciones y personas que respetan el Estado de Derecho y se la juegan cotidianamente por la tarea de contagiar esperanzas, y superar las minucias que el necesario y democrático roce del trabajo comprometido provoca. No faltaba más.
Y no había terminado de trasmitir a los organizadores, como una prueba de mis palabras la foto que tomara y remitiera al día siguiente el Quinjote Javier Garcia, con una cámara de poca resolución, cuando Gabriel Ruiz , director de la revista electrónica NTC … , me acercaba a estas orillas la noticia de que William Ospina había sido elegido para recibir el gran Premio Romulo Gallegos de Narrativa 2009 por su novela El País de la Canela .
Ahora queda, como un recuerdo para mis rescoldos, la foto imprecisa con William Ospina y Carlos Muquitay, un día antes de que le otorgaran ese premio continental que fortalecerá la trascendencia del II Encuentro Nacional de Escritores Luis Vidales. En este novísimo escenario para la literatura nacional, William Ospina, el actual Romulos Gallegos de Narrativa será un referente teórico y creativo sobre la Novela Histórica.
Todos a Calarcá a aplaudir a este grande escritor del Tolima, que por su juventud y maestría en tantos géneros, es, sin duda, el más importante escritor de Latinoamérica de la generación posmacondiana.
Carlos Alberto Villegas Uribe
Madrid, 5 de mayo de 2009
-- * CARLOS ALBERTO VILLEGAS URIBE http://termitacaribe.blogspot.com/ , http://www.youtube.com/watch?v=dy1s9wIXmkM , http://lacomunidad.elpais.com/tags/carlos-alberto-villegas-uribe http://bitacoradeulises.blogspot.com/ , http://redreir.blogspot.com/ , http://www.agregarte.com/?idAutor=1193&idSala=1 , http://ahiestapinta2.blogspot.com/
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William Ospina, un campesino ilustrado
Por Julio César Londoño
http://www.elpais.com.co/blogs/principal/blog1.php?b=11&n=677
Blog en EL PAÍS de Cali, Actualizado en 2008-05-20 Tomado de la Revista Libros de Arcadia
Jubilados ya Gabo y Mutis, y con Fernando Vallejo patinando en círculos irascibles, William Ospina se perfila como nuestro escritor más representativo. Ospina llena los auditorios, sus libros se venden como el pan, son textos de estudio en las universidades y humedecen las yemas de los dedos de sus excitados lectores. Los detractores lo acusan de publicar tratados a la menor provocación. En su defensa, hay que decir que esos libros son polémicos y delicados a la vez, y han sido elogiados por escritores tan planos como Vargas Llosa o tan barrocos como García Márquez.
Todo empezó años atrás en una finca del Páramo de las Letras donde transcurrió su infancia. “Aquella fue la época más bella de mi vida –cuenta ahora– porque yo pasaba los días esperando el atardecer. Y a la hora en que caían las sombras, hora que en las violentas montañas podía ser la más temible, entraba con mis hermanos a una casa vecina, a disfrutar de un tesoro que se quedó conmigo. Don Ruperto Beltrán, el hombre más viejo del vecindario, parecía conocer todos los cuentos del mundo y nunca se cansaba de contarlos”.
Luego la familia Ospina Buitrago se fue a vivir a Cali y el joven campesino William Ospina empezó la carrera de derecho pensando, supongo, que así podía sobrevivir en este laberinto que lo asustaba más que las montañas, en este perímetro de leyes, signos, trampas y tentaciones, la ciudad. Pero la brisa de las cinco del Caliwood le trastornó el cerebro, abandonó la universidad, se dedicó al estudio de la preceptiva durante siete inviernos con una devoción que ya la quisiera el Vaticano para sus curas, y llenó cuadernos y cuadernos con unos versos que parecen dictados directamente por el Espíritu.
Al norte está la razón estudiando la lluvia, descifrando los truenos./ Al sur están los danzantes engendrando la lluvia/ al sur están los tambores inventando los truenos.
También escribió, claro, versos inspirados en la carne.
Tanto mintió con esos labios rojos/ tanto mintió con esos ojos sabios/ que al fin mentira fueron también los ojos/ y al fin mentira fueron también los labios
Cali no era esa olla espantosa que es hoy. Flotaban en el aire Los Beatles, el hipismo, la marihuana y la minifalda. Todo el mundo quería hacer algo. Carlos Mayolo, Luis Ospina y Andrés Caicedo hacían cine. Enrique Buenaventura y Fanny Mikey daban tumbos en los laberintos del realismo socialista. De Siszlo, Obregón, Rayo y Guayasamín visitaban a Tejada, Alcántara y Negreiros. El mismísimo Borges vino un día. Gonzalo Arango y Jotamario Arbeláez cavaban aquí la trinchera central del nadaísmo. Un grupo de mujeres comandados por Maritza Uribe había construído el Museo La Tertulia y organizaba concursos y revistas literarias. Cali era una fiesta.
Un día, Ospina se despertó sobresaltado luego de una noche de sueño muy intranquilo. Se había convertido en un monstruo, en el antónimo del poeta: ¡era un ensayista! Resignado, tomó su rapidógrafo negro punto cinco y escribió miles de páginas precisas sobre los méritos de América y el legado de Europa, sobre la educación, la medicina, las ciudades y la publicidad, y al tiempo, contra Europa, contra las ciudades, contra la publicidad, contra la medicina y contra la ciencia entera, con una furia controlada y una prosa que nos hizo contener el aliento a todos, y se resignó a ser el mejor ensayista en la tierra de Baldomero Sanín Cano, e incluso en la tierra de Germán Arciniegas.
Pero el destino aún le tenía reservada otra sorpresa: al éxito editorial y los grandes tirajes, al oro y los claros clarines y las giras triunfales no llegaría montado en los arpegios de la poesía ni parapetado en los rigores del ensayo sino en un volumen gordo y ligero a la vez, Ursúa, la primera novela íntima sobre la Conquista de América. Casi sin percatarse, se había convertido en un referente moral e intelectual obligado, un autor al que los profesores volvían la mirada en momentos de crisis y los gestores culturales a la hora escoger los ponentes de los seminarios. Recordé un ensayo de su juventud que evocaba con nostalgia la antigüedad, cuando el poeta era una parte vital de la comunidad, alguien que contaba la historia de su nación y escribía sus mitos, inventaba sus dioses y componía sus canciones, y pensé, William, se están cumpliendo todas tus utopías.
Ospina acaba de poner en librerías La escuela de la noche, una compilación de ensayos sobre la relación entre la literatura y la vida escritos con el tono y el enfoque de la poética. (Recordemos que sobre la literatura se pueden decir generalidades en un lenguaje plano, como el que utiliza la teoría literaria; o en prosa y sobre una obra concreta, como lo hace la crítica; o generalidades en prosa, como la poética, una suerte de filosofía de la literatura, a la manera de Wilde, Reyes, Valéry o Borges).
Aparentemente es un libro para escritores. Los títulos de los capítulos son las ciudades y la poesía, la novela y la historia, el sentido del libro, el artista y sus dioses, pero en realidad es un libro de humanidades que puede ser leído con provecho por cualquiera porque de lo que aquí se trata es de la relación de la literatura con la educación, la ecología, la infancia, la política. En estos ensayos brillan su riqueza especulativa, su prosa tersa que no se arruga ni en las peores trifulcas y sus enumeraciones sustentadas: Ospina no se limita a decir, como cualquier charlatán, “Homero, Dante, Shakespeare y Cervantes”, sino que añade a cada elemento de la enumeración una frase que lo define. Pero lo mejor es que uno siente que detrás de estas destrezas hay un hombre emocionado por el universo y preocupado por el mundo, por la terca realidad.
Yo le debo muchas horas de solitaria felicidad a este hijo del Tolima. En sus libros he aprendido muchas cosas y he repasado otras como debe ser, con alegría. También, hay que decirlo, le he robado algunas cosillas, un giro, una idea y a veces párrafos completos. Nunca me lo ha reprochado. El bosque no echa de menos una hoja.
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VIDEO. "Entrevista con Julio César Londoño y William Ospina"
834 - Entrevista con Julio César Londoño y William Ospina (No. 0834 . Guatemala, Dic. 2008)
http://www.libreencuentro.com.gt/ArchivodeProgramas/Programas2008/834EntrevistaconJulioC%C3%A9sarLondo%C3%B1oyWilliam/tabid/215/Default.aspx
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AUDIO [100:52m]
Julio César Londoño y William Ospina en SOPHOS
http://blog.sophosenlinea.com/?p=401 Allí el audio.
Durante su gira por América Central (Dic. 2008), los escritores colombianos William Ospina y Julio César Londoño se detuvieron unas horas en SOPHOS, gracias a la coordinación del señor Eduardo López Sabogal, Embajado de Colombia en Guatemala. Aquí, conversaron con José Luis Perdomo Orellana, con Raúl de la Horra y con Luis Aceituno.
La conversación, muy fluida, relajada y rica en reflexiones sobre el oficio del escritor y del artista, pasó revista de muchos grandes escritores colombianos hemisféricamente importantes como son Vargas Vila, Barba-Jacob, Mutis, Andrés Caicedo y Gabo, por supuesto, entre otros.
Una discusión sobre el progreso en el arte, sobre el diálogo posible y necesario en nuestros paises, sobre la cultura latinoamericana, y sobre las mañas y quehaceres diarios del escritor.
En resumen, un nutrido y refrescante café literario.
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ENLACES.
*** WILLIAM OSPINA ES MI GALLO . http://mistercolombias.blogspot.com/2009/06/william-ospina-es-mi-gallo.html . Por Marco Tulio Aguilera
*** NTC … 300 , http://ntcblog.blogspot.com/2009_03_22_archive.html Numeral 5. 5.- Presentación de William Ospina. Por Julio César Londoño .
En el Encuentro Anual de Confraternidad Médica Nacional. No.19 .
*** Julio 1, 2009
WILLIAM OSPINA CORONADO CON EL RÓMULO GALLEGOS
Por Eduardo García Aguilar
Jueves 4 de junio de 2009 http://egarciaguilar.blogspot.com/2009/06/william-ospina-coronado-con-el-romulo.html (Eduardo Garcia Aguilar , BLOG LITERARIO DESDE PARÍS)
Texto reproducido en: Revista Número # 61, Junio, Julio y Agosto 2009 . Páginas 6 y 7. Próximamente en http://revistanumero.com/web/ (Hoy está hasta el # 60)
Reprodujo, publica y difunde: NTC … Nos Topamos Con … http://ntcblog.blogspot.com/ , ntcgra@gmail.com . Cali, Colombia, Julio 1, 2009
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